Muñeca Rota
Desde mi solitario lugar veo como los demás sonríen, juegan y son felices; y no puedo evitar pensar que ojalá yo tuviera su misma suerte, la suerte de tener amigos, de que alguien me quisiera.
Día tras día la oscuridad me consume, cada día una persona mas me lanza dardos con el veneno de sus palabras, frases como: “ Tú aquí sobras”, o “nadie quiere estar contigo” ,”Siendo tú jamás tendrás amigos y nadie te va a querer” son mi pan de cada día, los dardos cada vez son mas y duelen menos, poco apoco el veneno a ido haciendo mella en mí.
Gracias a el ahora soy como una muñeca rota incapaz de volver a sonreír y ser feliz; Soy como una niña que busca a alguien en quien pueda confiar alguien que la proteja, y que la haga sentirse querida.
Cuando ya pensaba que esta oscuridad que inunda mi pecho iba apoderándose de mí poco a poco apareciste tú iluminando mi vida con tu luz me enseñaste a que si hay personas que me quieren que tengo el mismo derecho que cualquier persona a estar en cualquier lugar y que soy perfecta tal como soy que no he de cambiar porque otros me lo digan
Poco a poco fuiste sacando el veneno de esos dardos que durante largo tiempo me llenaban de oscuridad y me hacían sufrir;
Gracias a ti e dejado de ser una muñeca rota que no podía ser feliz; Tú me has devuelto el sol y la alegría que el veneno me arrebató.
Por fin esta muñeca puede sonreír y ser feliz y solo me queda por decir: Gracias por devolverme a vida.
Siempre : Marta Nicolás
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